El mindfulness está de moda: mindfulness en publicidad
El Mindfulness está de moda. Cada mes revistas de lifestyle moda y tendencias nos hablan de esta técnica que se presenta como la poción mágica que nos salvará de la peste de nuestra época: el estrés.
Más allá de las revistas el mindfulness se cuela en la publicidad. Cada vez más marcas nos animan a vivir en el presente, a prestar atención a lo que hacemos y a tomarnos una pausa para respirar. Lógicamente, si en este proceso además usamos su producto… Mucho mejor.
La llegada del Mindfulness a la publicidad es un fenómeno interesante. De alguna manera nos habla de varias necesidades: la necesidad de parar, de bajar el ritmo de nuestras actividades y de nuestra mente, de aumentar la atención y disfrutar lo que hacemos. Así planteado, ¿quién no lo compraría?
A veces hay que parar para poder seguir
Limpiar el coche en una estación de servicio Repsol nos permite unos minutos para parar, conectar con nosotros mismos, con nuestra respiración… Conducimos pensando en ese proyecto que tenemos que presentar mañana, en la compra, las obligaciones familiares. Nuestra mente no nos da ni un minuto de descanso, y de repente entramos en un túnel de lavado.
Disfrutar de la visión del agua y la espuma cayendo sobre el cristal en un momento en el que podemos elegir entre volver al centrifugado de nuestra mente… o simplemente observar lo que pasa… unos minutos de descanso que nos darán perspectiva con respecto a lo que ocurre.
Cuando conduzcas, conduce.
¿Y por qué arrastrar preocupaciones y problemas allá donde vamos? BMW nos recuerda que no es necesario, que podemos dejarlos a un lado.
Cuando trabajemos estaremos en ello al 100%, pero cuando descansemos también, dejaremos a un lado pensamientos, preocupaciones, cuestiones de agenda… solo descansar. Cuando intentemos algo, lo vamos a hacer de verdad, con todas nuestras fuerza, los esfuerzos a medias nos llevan solo a objetivos medios; y cuando perdamos, cuando venga la adversidad, también estaremos en ella al 100%, pero solo el tiempo que dure, no la alargaremos con nuestras reflexiones sobre lo que deberíamos haber hecho, sobre cómo hubieran sido las cosas si eso no hubiera ocurrido o lo poco o mucho que nos lo merecemos. Cuando conduzcamos conduciremos, solo carretera, volante, el paisaje deslizándose a los lados… no habrá pensamientos que nos hagan perdernos el camino. Sea o no con un BMW, el consejo nos lo quedamos.
No dejes de hacer lo que hacer para fotografiar ese momento
¿Cuantas puestas de sol has visto mirando alternativamente a la pantalla de tu móvil y al horizonte? Es muy difícil que una pantalla te devuelva una experiencia tan bella como la que disfrutarías si te entregaras a ella, y eso es lo que nos cuenta Gopro en su último spot.
Quizá estés en una fiesta, jugando con tus hijos o ante el paisaje más maravilloso que has visto jamás, y entonces surge el imperioso deseo de querer tener ese momento en tu móvil, así que dejas de vivirlo para simplemente captarlo.
Es cierto que fotografiar es cuestión de segundos pero, ¿qué hay de esa actitud de entrega y conexión que experimentas cuando simplemente vives, cuando no hay más preocupaciones que experimentar ese momento? Poco a poco vamos perdiendo esos espacios, aunque quizá la tecnología sigua evolucionando para devolvérnoslos…
Por nuestra parte solo queda una reflexión ¿Qué ocurre con los miles de fotos que has acumulado en tu Smartphone? ¿esta el volumen de fotos desbancando el valor que solían tener?
El hecho de que la publicidad recurra al mindfulness para seducirnos nos demuestra que verdaderamente una actitud mindfulness es un objeto de deseo. Todos queremos disfrutar de los buenos momentos y liberarnos de determinados pensamientos. Queremos dejar de correr y conectar más con nuestros sentidos: oler, saborear, oír, ver, sentir… En definitiva queremos disfrutar más de la vida que ya tenemos para, simplemente, ser más felices.
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